Podrías preguntar “¿Por qué alguien tendría insectos y otros invertebrados como mascotas?”. Para mí esa es una pregunta fácil: Amo sus bellas y extrañas formas, sus colores, su diversidad, su inusual comportamiento, y su interesante ciclo de vida. Afortunadamente, muchas otras personas por todo el mundo descubren lo divertido que es tener insectos como mascotas! En Europa, Estados Unidos, y Japón, mucha gente mantiene y cria insectos, lo que ayuda a tener más conocimiento y especies disponibles.

Invertebrados como las mantis religiosas y los insectos palo son mascotas fascinantes y muy prácticas. Vienen en bellas formas y colores y muestran comportamientos particulares. Es fascinante ver a los animales cazar, crecer, mudar de piel, poner huevos, y ver sus métodos de camuflaje y defensa. Una ventaja práctica adicional son sus modestos requerimientos de vivienda, cuidado y comida. Comparados a mascotas comunes como gatos, perros, roedores y aves, los invertebrados requieren de menos espacio y tiempo. También son inofensivos, están libres de alergias, y su comida es menos costosa que la de las mascotas más comunes. Todo esto los hace un grupo de animales cada vez más popular para tener como mascotas, ¡para chicos y grandes por igual!

Una bella mantis reilgiosa rosa y blanca – la mantis orquídea

Un insecto hoja – Phyllium sp. phillipines

Un diablillo de las flores (Blepharopsis mendica) en pose de defensa

Una oruga